Aplicación de la teoría de la autodeterminación en la práctica clínica para el cambio de estilo de vida exitoso a largo plazo: lecciones de un caso

Resumen

La adherencia a cambios de estilo de vida, como la actividad física y la alimentación, es fundamental para reducir la morbilidad y mortalidad asociadas a enfermedades crónica no transmisibles. Sin embargo, la calidad de la motivación desempeña un rol clave en la mantención de estas conductas, especialmente en contextos clínicos como la medicina del deporte y la medicina preventiva. Según la Teoría de la Autodeterminación (SDT), la motivación se distribuye en un continuo que va desde la desmotivación (ausencia de intención), pasando por la motivación extrínseca —la cual varía en su grado de autonomía (regulación externa, introyectada, identificada e integrada)— hasta la motivación intrínseca, donde la conducta es completamente autodeterminada. El cuestionario Behavioral Regulation in Exercise Questionnaire (BREQ-3), basado en la SDT, permite cuantificar estos subtipos de motivación, siendo una herramienta clínica útil para personalizar las intervenciones.

Un hombre de 29 años con obesidad consultó mediante telemedicina en busca de orientación en materias de ejercicio y nutrición. La evaluación inicial con BREQ-3 evidenció la predominancia de regulación introyectada (13/16 puntos), lo que indicaba una motivación guida por la culpa y las expectativas sociales. Se implementó una intervención estructurada basada en los principios de la SDT, que integró entrenamiento aeróbico y de fuerza, metas de pasos diarios, modificaciones nutricionales y estrategias conductuales, con el objetivo de favorecer formas más autónomas de motivación. A los 14 meses, una nueva evaluación con BREQ-3 mostró un aumento en motivación intrínseca (+4) e integrada (+3), junto con una disminución en regulación introyectada (-2) y externa (-5), lo que reflejó una mayor alineación entre el ejercicio y los valores personales. Diecisiete meses después del alta, y en ausencia de acompañamiento profesional, la motivación se mantuvo altamente autónoma, con un puntaje máximo en motivación intrínseca (16/16) y un puntaje elevado en regulación integrada (13/16), lo que evidencia un cambio conductual sostenido.

Este caso resalta la utilidad clínica de BREQ-3 para evaluar y guiar intervenciones centradas en la motivación. La transición observada desde formas de motivación controlada hacia motivación autónoma refuerza la eficacia de las estrategias propuestas por la SDT para fomentar cambios conductuales a largo plazo. Estos hallazgos sugieren que integrar la evaluación motivacional en la práctica clínica habitual podría mejorar la adherencia en diversas poblaciones, optimizando así los resultados de las intervenciones sobre el estilo de vida.